Si no estás familiarizado al Pilates Máquinas, al igual que con el Pilates Suelo trabajamos todo el cuerpo, se refuerzan los músculos débiles, y se aumenta tanto la fuerza como la flexibilidad. La principal diferencia es que con el pilates máquinas los aparatos ofrecen una doble función: ayuda y/o resistencia.
Estos son algunos de los beneficios que puede aportarte el pilates con máquinas especializadas:
Este beneficio es muy relevante para los principiantes del Método Pilates, ya que los aparatos sirven de guía para la realización de los ejercicios. La posibilidad de asistir el movimiento en la ejecución de los ejercicios hace más fácil su realización, permite al alumno centrarse más en sus músculos y articulaciones y evita lesiones.
Realizar ejercicios sobre una base estable, ya sea sobre el Reformer o Cadillac, permite estabilizar la columna vertebral y protegerla.
Es importante regular el trabajo de cada alumno a sus objetivos y posibilidades. Algunos aparatos de Pilates cuentan con un sistema de resistencias que suponen un reto para el principiante pero un reto aún mayor para los alumnos avanzados ya que una rutina con aparatos supone aumentar la intensidad de forma periódica y permite aislar mucho mejor músculos en busca de un trabajo más específico.
La corrección postural a la hora de ejecutar movimientos sobre los aparatos de Pilates es un seguro a la hora de realizar correctamente los ejercicios y así evitar movimientos erróneos que puedan derivar en lesiones.
A mayor control de movimientos, más fácil aplicar uno de los principios del Método Pilates; la concentración. A mayor concentración, mayor precisión de movimientos.
Los aparatos de Pilates nos sirven de guía para aislar movimientos específicos y mejorar la precisión de ejecución.
Según aumenta la tensión del muelle aumenta la resistencia, es una excelente manera de aumentar progresivamente la resistencia del ejercicio de Pilates.
Tener bien colocada la cabeza durante la ejecución de los ejercicios nos evitará tensiones excesivas por sobrecargas en el cuello. Una lesión de lo más frecuente si aún no dominamos correctamente nuestro cuerpo.